martes, 26 de marzo de 2013

Por cada lágrima.

Una. Dos. Tres. Cuatro gotas. Y entre cada lágrima del cielo, aplausos. Es una habitación antigua, llena de robustos bancos de madera y en el centro, reluciente como el mismísimo Sol, un piano.

Entonces, entra ella, insegura y nerviosa, camina lentamente hacia él. Abre la tapa y se oye el sonido de las hojas pasar, ese tenue sonido. La chica se pasa las manos por su melena castaña y respira profundamente antes de empezar a tocar. Segundos después, sus dedos se posan en las teclas y empiezan a moverse a toda velocidad. Sus ojos castaños se iluminan y deja de ser la insegura chica de antes para dar paso a otra totalmente diferente. Esa chica que consigue que todas las personas que la escuchan olviden sus problemas y se sumerjan en la música. Ahora las gotas ya no provienen del cielo. Aquella anciana de allí, aquella que acaba de enterarse de que su marido ha fallecido, sí, esa misma que sonríe. Esa misma que llora de emoción. Todos sonríen y lloran.

Y es en ese momento, en ese precioso y mágico momento, cuando todo el mundo es feliz, feliz gracias a ella.

Algún día, quiero ser capaz de hacer eso. Capaz de conseguir que todas las personas a mi alrededor lloren de felicidad, se emocionen y olviden su tristeza, la melancolía que invade sus vidas.
Sí, podría, como John Lennon, querer la felicidad, pero prefiero mil veces más hacer a la gente feliz.



No olvidéis pasar por Tú y yo, juntos...

9 comentarios:

  1. Dios, qué preciosidad!!! Yo también deseo eso, ojalá lo consig prnto :3

    ResponderEliminar
  2. Comparto lo que dices porque también me gusta hacer felices a las personas.
    En cuanto a la música... puede que sea difícil proyectar la emoción, pero si te lo propones no tendrías por qué no poder! Así como lograste que me emocionara con tu texto. Cariños y éxito para que cumplas lo que te propongas :)

    ResponderEliminar
  3. Me gusto muchisimo la entrada. Tus palabras estan muy lindas.. Ademas adore la obra de Chopin! es tan magnifica*-* esta muy bien tocada♥ saludoss

    ResponderEliminar
  4. Me ha encantado, hacer feliz a las personas te hace feliz a ti. Cuando ayudo a alguien me siento feliz, porque sé que he hecho a alguien sentir bien. Besos.
    Angelics

    ResponderEliminar
  5. Preciosa entrada *-* Yo también amo hacer feliz a las personas, hacerles llorar de alegría y de emoción (no de tristeza). Y el vídeo... fantástico, como la entrada y como tu manera de escribir.
    Un beso!

    ResponderEliminar
  6. Siempre he deseado tocar el piano... Y sí lo sabes hacer ya me has hecho sonreír :)

    ResponderEliminar
  7. Me gusto mucho la entrada♥ Saludos!

    ResponderEliminar
  8. 'Sí, podría, como John Lennon, querer la felicidad, pero prefiero mil veces más hacer a la gente feliz' Increíble esa idea *-*

    Y pucha, esa canción de Chopin la había escuchado pero no la tenía en mente (Siempre me decían que escucha a Chopin continuamente). Me enamoré de la forma de rozar su mano con el teclado, tan suave y rápido :) -Ese video no debería tener dislikes-.
    La historia que le has metido está muy buena, me encantaría ver una escena así pero con mis propios ojos :)

    ResponderEliminar
  9. Qué cosa tan hermosa... Si hay algo que es gratificante, creo que es el saber que uno puedo hacer sentir bien a otras personas. No sé si habrá una razón, o sólo será cosa de la naturaleza. Pero creo que el poder hacer felíz a la gente es un don que uno desarrolla con el tiempo si así lo desea :). Las sonrisas cambian vidas, después de todo.

    ResponderEliminar

Coméntame, cuéntame que opinas y si tienes un blog, no dudes en hablarme de él. Me pasaré en cuanto pueda :3