viernes, 29 de noviembre de 2013

Su vida pendía de un balcón

Las miradas tristes de la gente. La calle más oscura que nunca. Las finas gotas de lluvia que te iban calando. Las lágrimas de un niño que no entendía nada. El sonido de los pasos de la gente al pisar los charcos. Todos mirando hacia el mismo sitio.

Y la mujer, temblorosa, colgada del balcón amenazando con quitarse la vida.

Una chica asomándose por la ventana y suplicándole que no lo hiciera. Un hombre preguntándose que quedaba de la mujer con la que se había casado. Y yo, pensando qué había tan malo en su vida como para querer quitársela.

Y la mujer, temblorosa, colgada del balcón amenazando con quitarse la vida.

Recuerdo que vi a mi padre en aquel hombre, la forma en que se movía con tranquilidad hasta en el momento más crítico. Vi los ojitos de mi hermano en los de aquel niño confuso. Me vi a mi misma en la chica que le gritaba a su madre que no lo hiciera. Recuerdo a esa mujer como si mi madre hubiera sido.

Y cerré la ventana, rápidamente, porque no quería seguir mirando.


6 comentarios:

  1. "Su vida dependía de un balcón"
    cómo es posible que un título llame tanto la atención?

    sabes cual ha sido mi reacción al acabar de leer esta entrada? :
    "HOSTIAS!" y se me ha puesto la piel de gallina!!
    creo que no tengo nada más que añadir... bueno, sí : IMPRESIONANTE!

    Un beso! ;)
    http://myworldlai.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  2. La verdad es que es duro perder a una madre... Sé (o espero) que no es tu caso, pero simplemente, es duro. Has descrito con una frialdad y a la vez, belleza, impresionante. Sabes que me encantan tus relatos, así que no soy muy objetiva.
    Besos:)

    ResponderEliminar
  3. Sólo puedo decirte que me ha encantado tu manera de redactar en este texto, el hecho de que repitieses esa frase dos veces, remarca la dura decisión de tirarse al vacío no, o eso me ha parecido a mí. Pienso que el hecho de suicidarse no es más que egoísmo, porque si no fuese así, se pensarían más el hecho de hacerlo, porque sabrían que están haciendo daño a las personas que quieren. Aún así, entiendo que es un momento de desesperación...
    Buf, me ha fascinado, Amanda, en serio...
    ¡Un beso muy muy muuy grande! <3

    ResponderEliminar
  4. Qué fuerte escrito. Me dejaste con un huequito en el alma, quiero decir que realmente lograste transmitirme todo con tu texto. Y eso es admirable.

    Un abrazo enorme!

    ResponderEliminar
  5. Me sentí ahí, te vi asustada cerrando la ventana, vi tus manos temblando al enviar el whatsapp al grupo, te prometo que lo vi, es un relato hermoso, me pregunto si esa mujer sabrá que inspiró una obra de arte como todo lo que escribes.
    Eres la mejor

    ResponderEliminar
  6. uhhh que cosas leo tan maravillosas creadas por ti.. Es duro. Pero me encanto. Saludos

    ResponderEliminar

Coméntame, cuéntame que opinas y si tienes un blog, no dudes en hablarme de él. Me pasaré en cuanto pueda :3